Un antiguo maestro del cole, Cayetano, al que algunos conoceréis porque os dio clase de inglés, ha querido colaborar con nuestro blog porque todavía se siente cerccano a nosotros. Me escribió pidiéndome que os hiciera llegar esta REFLEXIÓN que viene como anillo al dedo para los días que estamos viviendo.
Es una reflexión que nos viene bien a todos y a todas: niñas, niños, familiares, maestros y maestras, y para todo aquella persona que sea usuaria de nuestro blog.
Cayetano me comenta que serguirá colaborando. Desde aquí le doy las gracias
DEPENDEMOS LOS UNOS DE LOS OTROS
La naturaleza es, sin lugar a duda, el más claro ejemplo de equilibrio donde todo está interrelacionado, donde cada
elemento o ser vivo depende uno del otro. No hay más que mirar como el ciclo
del agua, con su lluvia, filtración, evaporación, condensación y vuelta a
empezar, nos muestra que todo es necesario y tiene un equilibrio perfecto. En
la sabana africana, de la misma manera, podemos observar como la gacela depende
de la planta que crece tras la época de lluvia, y esta, a su vez, servirá de
alimento para la hiena. Todo ser vivo
(plantas, animales, hongos…) en su proceso evolutivo establece relaciones de
competencia, cooperación y alimentación. Todas estas relaciones son
importantes, necesarias y complementarias, pues les hace evolucionar y
perpetuarse como ser vivo.
La CCOPERACIÓN puede ser la relación más importante que
establecen los seres vivos, pues gracias a ella pueden conseguir beneficios
mutuos, como si fuese “un trato“ entre ellos.
¡Piensa en el pájaro picabueyes y el búfalo!, el búfalo da cobijo y
protege al pájaro picabueyes de otros pájaros y el pájaro le devuelve “el
trato” quitándole del lomo garrapatas y chinches.
Nosotros, como seres vivos,
formamos parte de la naturaleza y aunque a veces se nos olvida, en días como
hoy vemos, vivimos, sentimos y necesitamos de la cooperación y ayuda de unos
hacia los otros.
El profesor depende de sus
alumnos para dar la clase de naturales, el médico necesita del paciente para
poder curar, los hijos necesitan del
cariño de la familia para que su corazón crezca, y esta necesita de sus hijos
para recordar que un día, hace no mucho tiempo, fueron niños. Todos y cada uno
de nosotros necesitamos estar unidos, hacer el bien sin mirar a quien, dar al
prójimo todo lo que está en nuestra mano, comprender que solo cuando avanzamos
juntos hay un verdadero sentimiento de felicidad.
No conozco a ninguna persona que sea capaz
de decir “yo no necesito nada de nadie”.
Todos tenemos dones, habilidades, capacidades que podemos y necesitamos
compartir con los demás para ayudar y mejorar. Cuando trabajamos en equipo
nuestro éxito está asegurado.
Estoy seguro de que en estos días
que están siendo especialmente delicados, puedes observar la cooperación entre
todos los que formamos este planeta llamado Tierra, donde palabras como ayuda,
solidaridad, gracias, te quiero o estoy contigo tienen un valor que se
multiplica por 1.000.
¿Qué opinas? ¿Crees que es
necesaria la cooperación de las personas? ...la naturaleza parece tenerlo
claro. ¿Y tú?
Cayetano
Hola profe Luga,
ResponderEliminarSoy Elena Castandedo. Me ha gustado mucho el texto del profe Cayetano, mándale por favor un saludo de mi parte y otro para tí.
Hola Elena.
EliminarMe alegra que te haya gustado, se lo comentaré al profe Cayetano y le enviaré tus recuerdos.
Un abrazo de codo
Elena, he recibido tus saludos y me han alegrado mucho el día. Te envío un abrazo (de codo, como dice el profe Luga) muy fuerte.
EliminarSoy Lucia Caro!! Me ha gustado mucho y decirle a Cayetano que lo hecho de menos y que aunque no esté en el cole tiene un sitio en mo corazon
ResponderEliminarLucia , tú también estás en mi corazón , fue una suerte ser tu profe.
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